martes, 1 de junio de 2010

Da pena!


Después de las elecciones Río San Juan más que dolor y vergüenza: Me da pena.


Como dominicano, los resultados de las recién pasadas elecciones congresuales y municipales en Río San Juan del 16 de mayo, 2010 me causan más que dolor y vergüenza, me dan pena.

Río San Juan, es un pueblo con un ayuntamiento (PRD) indolente, con matices de corrupto y 16 años de promesas incumplidas, con muchas resoluciones sin resolver. Somos un municipio donde todavía hay escuelas con niños que reciben docencia debajo de árboles, sentados en bloques de concreto, con escuelas, canchas y play, sin facilidades sanitarias.

Comunidades incomunicadas porque no existen caminos vecinales.

El PLD, a nivel provincial, no gano; se impuso chantajeando al pueblo con su miseria. Se impuso intimidando con actos represivos, agrediendo y manipulando los mecanismos y los recursos del Estado dominicano, con la compra y venta de cedulas, votos y voluntades, conocedores de las necesidades de un pueblo hambriento y olvidado, causado por ellos mismos.

Río San Juan es un pueblo donde todavía los niños viven con enfermedades curables, donde el hospital carece de medicamentos y equipos médicos, donde existen comunidades sin agua potable, donde barrios enteros viven en ciénagas bordeando desagües de aguas negras.

Un pueblo con una administración publica en la cual se ejerce el nepotismo liberrimamente donde el usurpo de los recursos se manejan al antojo de funcionarios, tanto del ayuntamiento como del gobierno, donde las instituciones castrenses se comportan como mafias y la justicia es barata, muy barata. Un pueblo donde la conciencia de todos pudo ser comprada por migajas de pan. Da mucha pena.

Río San Juan es un pueblo donde no hay fuentes de trabajo, donde los que están arriba se encargan a diario para que nadie suba. Donde los funcionarios que nos representan ante el gobierno apuestan por nuestro atraso y cobran por hundirnos. Donde la juventud después de estudiar, pasa el tiempo en esquinas o centros cerveceros. Donde nuestros llamados lideres tienen los pies de barro y juegan a dividirnos. Eso me da pena.

Según datos de la Junta Central Electoral, en Río San Juan, mi ciudad natal, la abstención fue de cerca de un cuarenta por ciento (40%) En el resto del país, mas de un cuarenta por ciento (40%) Para aquellos que desconozcan o quieran ignorar la realidad de hasta que nivel llega la corrupción, la abstención solo refleja mas que el disgusto y la desconfianza en los políticos tradicionales; refleja el fenómeno de la necesidad e impotencia que vive el pueblo.

Río San Juan es un reflejo del oportunismo de parte de las autoridades las cuales se aprovechan de la miseria de la gran mayoría, las cuales tratan de mitigar su hambre y pobreza y acceden a la compra de conciencia a través de la venta de sus cedulas y votos. Este es mi Río San Juan y por eso me da pena.

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